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jueves, 7 de julio de 2016

Un lugar maravilloso

TÍTULO: Un lugar maravilloso

AUTORA: Melissa Bank

EDITORIAL: Anagrama

FORMATO: Rústica

NÚMERO DE PÁGINAS: 393

FECHA DE PUBLICACIÓN: 2006

SINOPSIS:

Sophie Applebaum sabe muy bien que la vida te da sorpresas, y que no hay que dar nada por sentado. A los doce años, convencida de que su madre le había arruinado el último y maravilloso día de las vacaciones obligándola a ir a la fiesta de la hija de su mejor amiga, un festival kitsch todo decorado en rosa, huyó al aparcamiento. Y allí conoció al chico más interesante de la fiesta. Pero Sophie, a pesar de su sentido del humor, también tendrá que aprender que la vida no es fácil. Y cuando sus padres la obligan -cariñosamente, claro, porque Applebaum son una familia muy ilustrada y progresista judeoamericana de clase media- a aprender hebreo por las tardes, comenzará un periodo de resistencia pasiva, y acabará como cómplice involuntaria de Margie, la más rebelde de las Zorras, el grupo de chicas que le ha hecho la vida imposible en el colegio.

Pero la deliciosa novela de Melissa Bank sigue a su antiheroína a lo largo de muchos años: la encontramos en la universidad, compartiendo habitación con la glamurosa Venice, y aprendiendo los juegos de la seducción y del poder; en Nueva York, a los veintipocos años, navegando con una brújula muy incierta en busca de sí misma, de una vocación, de un hombre, de un trabajo. Los trabajos, los encontrará en una editorial, donde los manuscritos en la Batcueva, junto a la extraña Francine, que piensa que todos los aspirantes a escritor, por ilegible, insoportable o impublicable que sea, merece que al menos una vez en la vida alguien lo lea;  y en diversas agencias de publicidad, donde escribe anuncios, folletos, eslóganes, ficciones sobre toallas para niños y productos de belleza para adultos. Y los hombres serán unos cuantos: Josh, un joven poeta judío que huele como una biblioteca pública; el inasible, peligroso Bobby Guest; Neil, un médico divorciado que había sido el chico más plasta del instituto, y ahora habla de sus pacientes famosos para impresionar a los amigos de Sophie; y Chris, el que muere, y Seth, el que la lleva a un lugar maravilloso...

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Buscar ese lugar maravilloso es el objetivo de la vida de Sophie, ese lugar que contiene amor, trabajo, salud y una estabilidad. Algo que todos, en mayor o menos medida, deseamos y que, a lo largo de los años, intentamos conseguir. 

Un lugar maravilloso es el recorrido que realiza nuestra protagonista hacia esa meta. Las vicisitudes que la vida nos marca y la forma de afrontar estos problemas serán los momentos fundamentales de su camino y, por tanto, de este libro.  


Sophie será nuestra protagonista y la querremos y odiaremos a partes iguales. Una judía de clase media estadounidense y con una familia ejemplar. La veremos en diferentes momentos de su vida y esos detalles serán los que nos hagan establecer su personalidad.



Conoceremos sus primeros amores de infancia, esos que marcan para siempre y que te hacen sentir algo muy especial.



No parecía tener ganas de soltarme la mano, y cuando me miró, sentí un cosquilleo. No eran esas chispas minúsculas que se encienden y se apagan cuando se duerme un pie, sino algo único y continuo, como volar en sueños.





También viviremos esos primeros enfrentamientos familiares, cuando Sophie intenta mostrar su personalidad ante sus padres. Desacuerdos sobre sus clases extra escolares de hebreo. Fundamentales para su padre e innecesarias y aburridas para nuestra protagonista.


-Me he limitado a seguir las reglas- dije, usando la misma expresión que mi padre después de asistir a mi primera lección de tenis.

-Cariño, en la vida muchas veces no se puede hacer otras cosas. 
En mis días más combativos, le habría contestado: "Eso será en tu vida", pero ahora me quedé callada.


Otra parte fundamental de su familia la conforman sus hermanos. Robert y Jack serán dos pilares muy importantes a lo largo de la vida de Sophie. Hermanos muy diferentes entre ellos, pero siempre unidos en los momentos más necesarios.


Mientras mi hermano termina sus tortillas, yo hago planes para el futuro. Lo llevaré hasta su casa y subiré con él hasta su piso. Se acostará. Y yo iré a comprar comida. Lo llevaré a ver una película y luego iremos a un restaurante. Y me digo a mí misma, por si mi padre está escuchando: Nos cuidaremos el uno al otro.


Su paso por la universidad y las amistad que allí hace servirán de guía a una Sophie joven y desorientada cuyo futuro está aún por escribirse. Pero serán sus amores de juventud y, sobre todo, sus primeras rupturas sentimentales, las que irán forjando su destino.


Hasta ese momento, yo había estado en el primer estadio del amor, cuando crees que el amor te convertirá en la persona que quieres ser. Ahora, su tono cariñoso y sus sabios consejos me llevaron a un estadio posterior: sentí que tenía que fingir que era mejor persona de lo que en verdad era para que Josh me siguiera queriendo. Y era penoso, porque eso me hacia odiarlo.


Cuando nuestra protagonista se enfrenta a la idea de forjarse un futuro, una vez sale de la universidad, debe comenzar por cambiar de lugar. Salir de ese pequeño pueblo de Pensilvania e ir a vivir a la Gran Manzana. Comenzar en un lugar nuevo siempre es complicado, pero si ese lugar es Nueva York, la cosa se complica mucho más.


Pero aquel verano en Nueva York, especialmente al atardecer, en el Village, o en el centro, o en el Upper West Side, cuando caminaba en medio de la multitud o miraba hacia arriba, hacia las ventanas iluminadas de las oficinas, o de las viviendas, sentía que mi vida podía seguir mil caminos distintos.


Esos caminos se transforman en trabajos. La manera de conseguir subsistir en esa gran urbe es mediante un trabajo ya que Sophie no siempre puede estar viviendo de la caridad de sus hermanos por mucho que ellos la quieran proteger. Cada uno tiene que hacer su vida y mezclarse puede llegar a causar algún que otro encontronazo.

La búsqueda de un trabajo por necesidad hace que,  muchas veces, éste no sea el más maravilloso de tu vida, y mucho menos satisfactorio o que cumpla con tus sentimientos de realización personal. Esa será, quizás, la tarea más complicada a la que Sophie se tendrá que enfrentar.


Miraba a a mi alrededor en el trabajo y en la calle, en el metro y en el autobús, en los restaurantes, farmacias y tintorerías, y pensaba: Muy pocos la encuentran. Casi nadie. Robert había descubierto que su vocación era ser médico; Francine Lawlor, editora; Adam siempre había sabido que quería ser dramaturgo. Pero eran excepciones. Yo era como todos los demás; encontraba un trabajo, y trabajaba. No era un error desear algo más, pero sí lo era confiar en que te sería dado.


Todo lo que la vida nos pone en el camino, con sus decisiones acertadas y erróneas; las meteduras de pata y los triunfos. Todo lo que nos acontece, lo veremos reflejado en la figura de Sophie y nos reiremos y lloraremos con ella, la veremos crecer y realizarse como mujer, en cada uno de los pasos que da hacia ese lugar maravilloso que todos buscamos.

Una novela sin pretensiones. Sencilla pero a la vez conmovedora. Como un espejo de aquellos momentos de la vida que hemos vivido o nos tocará vivir.



AUTORA

Melissa Bank vive en la actualidad en Nueva York. Tras cursar estudios en el Hobart William Smith College y la Universidad de Cornell, ha trabajado en una agencia literario y como redactora publicitaria. En 1993 recibió el Nelson Algren Award al mejor cuento. Su primer libro publicado, Manual de caza y pesca para chicas, ha tenido un extraordinario éxito de crítica y público, tanto en los Estados Unidos como en Francia y los demás países donde ha sido editado.



PUNTUACIÓN: 2,5/5

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